A nuestra civilización tal como la conocemos se le está acabando el tiempo, pero la mayoría no ve la destrucción repentina que pronto caerá sobre nosotros. "Cuando las condiciones sean peores", 1 vendrá una advertencia directamente de Dios, y pocas personas son conscientes de la hora. Esto se puede calcular con precisión basándose en decenas de profecías disponibles para nosotros a través de santos católicos inspirados por el Espíritu Santo.
En el siglo XX, a Satanás se le permitió la oportunidad de cumplir su mayor desafío desde el comienzo de la humanidad. Este poder de la oscuridad ha ido aumentando durante los últimos 250 años desde el surgimiento de la masonería/Illuminati.
Después de la visión del Papa León XIII al final de la Misa, en 1884, se reveló que Dios permitió a Satanás dos peticiones distintas: Un reinado extendido para tener más tiempo y más poder.
Primero: Nuestro Señor permitió a Satanás un tiempo prolongado de 100 años para destruir la Iglesia. Según las profecías, ese tiempo llegó a su fin a partir de octubre de 2017, pero muchos errores siguen prevaleciendo hoy en la Iglesia.
Segundo: Nuestro Señor le ha permitido a Satanás un mayor poder sobre aquellos que se entregan a él, es decir, la Masonería/Illuminati; que engañan clandestinamente a la humanidad, acercándonos a la víspera de la destrucción. Cuando se desarrolle el primer evento nuclear, Dios intervendrá con el Aviso y un Derramamiento de Su Espíritu Santo. Luego, después de una espantosa crisis de increíble destrucción, Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción nos rescatará, pero los decretos de grandes cambios seguirán desarrollándose hasta 2038.
El Papa Juan Pablo II, durante su época como Papa, era consciente de una gran tormenta en el horizonte: "Precisamente al final del segundo milenio, se acumulan en el horizonte de toda la humanidad nubes enormemente amenazadoras, y la oscuridad cae sobre la humanidad". 2 ¡¡Se acerca un despertar!! El Papa Juan Pablo habló del Cordero (Jesucristo), que es el único capaz de abrir los siete sellos: " Ese rollo contiene toda la serie de decretos divinos que deben cumplirse en la historia humana para que prevalezca la justicia perfecta. Si el El rollo permanece sellado, estos decretos no pueden ser conocidos ni implementados, y la maldad continuará propagándose y oprimiendo a los creyentes. De ahí la necesidad de una intervención autoritaria. La haría el Cordero inmolado y resucitado... para tomar el rollo y abrirlo. sus sellos." 3
La apertura del primer sello es el Aviso o una Iluminación de nuestras almas y es la intervención autoritativa que tendrá lugar hacia el final de esta quinta edad de la Iglesia.
Garabandal, España, es donde María, Madre de Jesús, se apareció a cuatro niñas a principios de la década de 1960 y habla del Aviso por primera vez.